No hay nada más romántico que una boda en el campo, rodeada de naturaleza y con el encanto de la decoración vintage. Por eso, no es de extrañar que esta tendencia se haya convertido en una de las preferidas por las novias de hoy en día. Flores, materiales naturales, velas…La clave de las celebraciones campestres es cuidar al máximo los detalles.
Juega con los materiales naturales
Las bodas campestres son perfectas para celebraciones en primavera y verano, ya que te permitirán disfrutar del buen tiempo y el clima cálido. Si has escogido una finca o un jardín para pasar tu gran día al aire libre, ya habrás ganado muchísimo en cuanto a decoración. Por eso, juega con el encanto del lugar y no te excedas en la decoración.
Para sacarle el máximo partido al entorno y darle el toque vintage a tu gran día, escoge materiales naturales, como por ejemplo la tela de arpillera. Puedes utilizarla para decorar las sillas o como camino de mesa, además es un material muy agradecido porque es duradero y aguanta perfectamente sin deformarse ni deshilacharse. Su color es perfecto porque te combinará con el resto de elementos: una mantelería blanca y sofisticada o con vajilla de porcelana retro.
A la hora de elegir el mobiliario, apuesta también por los elementos naturales: madera y mimbre son la mejor opción. Una mesa de madera alargada en la que todos tus invitados puedan conversar y disfrutar de la fiesta en un ambiente muy familiar o sillones de mimbre en rincones pensados para un momento de relax e intimidad. No te preocupes si mezclas ambos estilos, ya que esta diversidad le dará a tu decoración un toque aún más campestre.
Flores y frutas, la combinación perfecta
Las flores no pueden faltar como elemento decorativo. Te aconsejamos que te inclines por aquellas especies salvajes: florecillas pequeñas, hojas de arbusto, margaritas, lavandas, etc. Con ellas podrás crear fabulosos ramos campestres, además, muy aromáticos. Las flores también son un gran recurso como centro de mesa. Aunque si quieres darle un toque más divertido, además de utilizar flores, utiliza frutas y verduras o utensilios del campo, como aperos de labranza o elementos del campo.
También puedes utilizar pequeños cajones de madera para colocar las frutas, redondeando así la estética campestre y rústica.
Por supuesto, no te puedes olvidar de las velas. Son perfectas para casi todo: como centros de mesa, para marcar caminos, para adornar rincones especiales…Además de una atmósfera muy cálida, conseguirás impregnar tu celebración de romanticismo.
¡Apuesta por una boda campestre y sofisticada! Ninguno de tus invitados olvidará tu gran día.