¿Buscas un lugar encantador para celebrar tu gran día? ¿Quieres que sea en Madrid? Existen multitud de rincones, fincas, jardines y espacios que son perfectos para preparar una boda sofisticada, romántica y chic. Para facilitarte la búsqueda, te descubrimos varios lugares preciosos en los que podrás tener una boda que nadie podrá olvidar.

Finca del Pendolero

El Pendolero es una de las fincas más exclusivas de Madrid. Una de sus mayores bazas es el mirador de la fuente, un lugar perfecto para la celebración del cocktail de bienvenida. Desde allí se puede disfrutar de todo Madrid al fondo mientras tus invitados saborean unos deliciosos aperitivos acompañados por un buen vino.
El espacio es ideal para preparar un gran buffet variado al aire libre que incluya un espectacular showcooking de arroz, sushi, carne, etc.
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Finca Soto de Cerrolén

Soto de Cerrolén es una casa situada en La Berzona (Torrelodones), a unos 30 km de Madrid. El paisaje que rodea la finca es uno de los mejores puntos de la finca, que además tiene unas vistas a inmensas arboledas en plena sierra madrileña.
En el Soto de Cerrolén, pueden celebrarse bodas de más de 200 invitados, por lo que es perfecta para todo tipo de bodas. Dependiendo del número de asistentes se organizará de una manera para sacar el máximo partido a la finca. Cuenta con patios al aire libre y salones interiores que te ofrecen muchísimas posibilidades.
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Aal Cachucho

En este caso, la finca es perfecta para una celebración en primavera o verano. Aal Cachucho está situada a 30 minutos de Madrid, en San Agustín de Guadalix, y cuenta con seis hectáreas rodeadas de encinas. Está llena de rincones especiales y los paisajes y las vistas son espectaculares. En Aal Cachucho encontrarás un lugar donde destacan la privacidad, la exclusividad y sobre todo, la originalidad.
La finca cuenta con varios espacios que podrás utilizar a tu gusto: una zona de ceremonias en lo alto de una colina, un precioso estanque con nenúfares, un patio floridoy un salón cubierto al que darle distintos ambientes. Además, tiene tres habitaciones dobles para que tú y tus invitados podáis descansar.
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El Molino Amarillo

El Molino Amarillo es un lugar que guarda un encanto muy especial. De hecho, es el último de los cuatro antiguos molinos que se encuentran en la Vega del Río Tajuña. La construcción es del s. XVIII y conserva la estructura original. El molino se ha preparado para albergar todo tipo de celebraciones y eventos, entre ellos una boda de estilo campestre como la tuya.
El Molino Amarillo está muy cerca de Chinchón y puede acoger hasta 200 invitados. Tanto la ceremonia como la celebración puedes plantearla al aire libre, en el jardín que rodea el molino y que tiene como fondo el agua que sigue corriendo por debajo, o colocando una carpa, más adecuada para estaciones como primavera y otoño.
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