Cómo elegir carpa para tu boda al aire libre determinará el resultado de tu gran día. Tu experiencia, tus recuerdos y el bienestar de tus invitados dependen de hacer una buena elección. Para que tu elección sea un acierto, repasamos los pros y contras de cada tipo de carpa para bodas.

 

Cómo elegir carpa para tu boda y acertar

Una vez que ya sabes que tu boda no se celebrará en un interior, sino en el jardín, lo primero que tienes que pensar es en el estilo que buscas. Existen varias opciones distintas de elementos que te ayudan a lograr tu objetivo, que es proteger a los invitados de las inclemencias del tiempo. Por eso, a la hora de escoger, has de optar entre:

  • Carpa: es la opción más conocida y puede ser también la que mejor encaja con tu estilo. Si no quieres dar protagonismo a este elemento y sólo buscas su funcionalidad y si lo que buscas es un marco que poder personalizar a tu gusto, no te plantees otra opción.
  • Carpa beduina elástica: nos gustan por el rollito que dan y lo bonitas que quedan. No tienen nada que ver con las opciones tradicionales, por lo que son la alternativa perfecta si sólo de pensar cómo elegir carpa para tu boda estabas pensando ya en considerar un interior.
  • Jaima árabe: pese a las limitaciones de espacio de esta opción, no apta para bodas grandes, se trata de una elección que imprimirá carácter a tu celebración. Existen muchos modelos en el mercado y, el que escojas, puede servirte como base para el resto de la decoración de tu gran día.

Si tienes claro ya lo que quieres, para saber cómo elegir carpa para tu boda, te hará falta decidir si quieres que tenga paredes o sólo techo:

  • Sólo techo: la ventaja de esta alternativa es que no hay nada que impida contemplar el paisaje y la finca donde celebras tu gran día y evitas ese inconveniente también para las fotos del reportaje de bodas. El problema es que, si bien la lluvia no debería afectar a los invitados, al carecer de paredes el viento sí podría hacerlo.
  • Techo y paredes: en este caso sabes que tus amigos y familiares estarán bien resguardados. El no tener que preocuparte de la climatología en una fecha tan importante ayuda a quitarse un peso de encima. El contra de esta opción es que limita el escenario de un momento tan importante como es el de la degustación del menú. No se ve paisaje y es difícil conseguir que la decoración pueda llegar a compararse con la de un interior.

 

¿Ya sabes dónde degustarás el menú de boda junto con tus invitados?