La búsqueda de centros de mesa para bodas son una parada obligatoria en la agenda de cualquier novia. La cuenta atrás de la planificación en los meses previos al gran día se completa con la elección de las flores. El ramo de novia, las flores que decorarán la finca para bodas y, cómo no, los centros de mesa para bodas.
Sin embargo, hay mujeres que, como tú, preferirían una alternativa a una tradición que no va del todo con ellas. Sea por el motivo que sea, muchas escogen otros caminos y sus ideas son un acierto. Te damos las pistas para que lo consigas.
Decoración sin centros de mesa para bodas
Es posible llevar a cabo una degustación del menú increíble en un entorno mágico en tu gran día sin la presencia de los centros de mesa para bodas que tanta pereza te da buscar. Puedes lograr que los espacios sean chic y cool al mismo tiempo y que no haya ni rastro de flores.
Para conseguirlo:
- No elimines las flores de tu boda por completo y lleva un ramo vegetal, en vez de otras alternativas. Eso sí, como será protagonista, busca flores exóticas, con mucha personalidad y poco vistas.
- Usa velas de diferentes tamaños para iluminar cada mesa y lograr que no queden tan desnudas. Esfuérzate en personalizar otros elementos como las mantelerías, el cristal o los cubiertos. Las sillas también pueden poner su punto: elige el tipo que más te guste para el estilo que quieras dar a tu boda.
- Inspírate por culturas lejanas y decide cuál será el elemento conductor de la decoración. Si tu boda todavía tendrá lugar en meses fríos, ¿qué te parecería usar pieles sobre las sillas? En vez de centros de mesa para bodas, de esta forma desvías la atención a algo mucho más rompedor. Si el gran día se celebrará en primavera o verano podrías usar pashminas indias o telas de sari, que pondrían, además, una nota de color y podrían usarse como detalle de boda para tus invitadas.
¿Ya sabes qué harás al final? ¿Te decidirás por poner un toque diferente con alguna de las ideas que acabas de leer?
